Un piso del cual no salir nunca
- 74 m22 habitaciones1 baño
- Eixample.Barcelona
Mirando a la avenida
Cuando el señor Cerdà diseñaba el Eixample barcelonés, le debió parecer que había demasiado ángulo recto y le metió unos tajos en diagonal por aquí y por allá en forma de avenidas: Diagonal, Meridiana, Sarrià, Gaudí, Roma y –quizá la mejor de todas– Mistral.
Porque ya que te vas a vivir junto a una avenida, mejor que sea tranquila en cuanto a tráfico. Con algunas terrazas para disfrutar del buen tiempo pero sin estar el espacio demasiado saturado. Con comercio de barrio y bares de siempre. Y si está escondida de la marabunta turística, mucho mejor. Y, puestos a pedir, le sumas una butaca cómoda, una bebida a tu elección, una galería soleada, y ya tienes el combo perfecto para perder (o invertir) las horas mirando a la avenida.