El Periodismo que nace del corazón del Mediterráneo: Josep Morell
Su trabajo, como el premiado documental «Los hombres del silencio», refleja su pasión por contar historias.

Josep Morell no entró en el mundo del periodismo por casualidad: lo suyo es totalmente vocacional. Lo demuestra su extensa trayectoria en grandes medios, sus aventuras periodísticas por Oriente Medio y un premio Ondas al documental “Los hombres del silencio”, de su productora Ottokar. Y para alguien que ha pisado tanto mundo, su hogar resulta un refugio ideal en el que relajarse con el olor a Mediterráneo y a jazmín.
«Siempre quise ser periodista y tener la oportunidad de poder contar historias.»
Háblanos de ti y de tu trabajo. ¿Dónde nació tu vocación? ¿Algún primer recuerdo?
Todo nace hace muchos años de la literatura y del realismo mágico de García Márquez. Siempre me gustó mucho leer y escribir mis propias historias, pero cuando estaba en el instituto y leí por primera vez a Gabo, me atrapó de tal forma que sentí que eso era lo que quería hacer, contar historias y dejar que las personas se sumergiesen en mi mundo, haciendo de lo extraordinario algo cotidiano y de lo aparentemente insignificante algo único. Busqué mi propio lenguaje y este lo encontré a través del arte y el color.
Mis primeros recuerdos son en la agencia Europa Press y en Catalunya Ràdio. Después llegó una de las etapas más fructíferas y creativas en la agencia CAPA, trabajando para Canal+ España y Francia.

¿Qué es lo que más te satisface de tu trabajo? ¿Alguno del que te sientas especialmente orgulloso?
Tuve un subdirector en el Diario de Barcelona, Josep Mª Huertas, que siempre decía que un buen periodista tiene que ser alguien que no quiera quedarse quieto en su mesa y que tenga la capacidad de querer descubrir cada día cosas diferentes. Mi trabajo me permite entrar en universos desconocidos, conocer y retratar a la gente, viajar. Conocer y descubrir.
Me siento orgulloso de los últimos trabajos, el documental “Los hombres del silencio” por el cual nos premiaron con un premio Ondas 2018 y el último que hemos producido y que se va estrenar a finales de este año, “Ernest Lluch; libre y atrevido” en el aniversario de su asesinato.
¿Cómo es tu proceso creativo?
No hay reglas o sí las hay para el proceso creativo. Me explico: a veces las explosiones en el córtex cerebral surgen de manera espontánea, en los lugares más inesperados, conduciendo en moto camino de Barcelona, paseando por el monte o montando en bicicleta. Ésta es una gama. La otra es trabajar la creatividad, sentarte, hablar, reflexionar… Muchas veces las ideas salen porque se trabajan. En definitva: La creatividad se debe trabajar… Como dice Ferran Adrià, la creatividad se debe alimentar (“Feeding creativity”).

Color, libro y peli favoritos.
Azul.
“Momentos estelares de la humanidad” de Stefan Zweig (editado en España por Acantilado).
“El guateque” de Blake Edwards.
¿Es tu casa reflejo de quién eres? Háblanos de tu hogar, qué es lo que más te gusta, a qué huele…
Sí, mi casa es bastante reflejo de los que viven en ella, bastante ecléctica. Me gusta el olor a Mediterráneo cuando llega la primavera debajo del olivo y se mezcla la planta de orégano, con la menta y el jazmín que tengo en el jardín.

Si pudieras comprarte cualquier cosa ahora mismo y llevártela a casa, ¿cuál sería?
Compraría tiempo.
Un planazo en casa siempre incluye…
Una conversación con amigos, hacer un sofrito en la cocina escuchando música.
¿Tienes algún plato estrella?

Foto de Carlos Román.
¿Cuál es tu lugar favorito en tu ciudad? ¿Y en el extranjero?
Cerca del mar, para poder oler la sal en el ambiente.
En el extranjero, la Puerta de Damasco con las campesinas vendiendo tomates y racimos de menta mientras entras en la ciudad vieja de Jerusalén.
Mi trabajo me permite entrar en universos desconocidos, conocer a gente, retratarla, viajar. Descubrir.
Algo que nos quieras contar y que no te hayamos preguntado. ¡Habla ahora o calla para siempre!
Callo para siempre… Como dice el derecho romano, quien calla otorga.
