Un joven agente inmobiliario rompiendo moldes: Àlex Soler

En el mundo de los negocios, a menudo nos encontramos con historias que desafían las expectativas y nos inspiran a mirar más allá de los estereotipos. La historia de Àlex Soler es una de estas. Hace dos años y medio, José Luis Echeverría, CEO de Monapart, recibió un correo electrónico que capturó su atención. El remitente era Àlex, un joven de 17 años con una pasión inusitada por el sector inmobiliario. 

Hoy, con Àlex ya establecido como agente inmobiliario y acumulando experiencias desde la agencia en la que trabaja en Vic, nos sumergimos en una conversación reveladora. Esta entrevista no sólo nos permite conocer la trayectoria de Àlex, sino que también nos ofrece una ventana hacia lo que podría ser el futuro del agente inmobiliario.

Primer contacto: un email

El 7 de abril de 2021, recibí un email que decía:

“Distinguido José Luis Echeverría, sé que está muy ocupado y que recibe muchos correos, así que éste sólo le tomará 60 segundos de su tiempo. Me llamo Àlex Soler y me apasiona el mundo inmobiliario.”

Más allá del “distinguido”, tan en desuso, ¿cómo no atender un email así? Luego supe que mi interlocutor tenía 17 años y ya no pude “soltarlo”; en parte por el evidente interés de entender una vocación inmobiliaria tan precoz y también, -¿por qué no?- por el placer de acompañar a alguien en sus primeros pasos en este oficio nuestro, que lejos de ser un oficio para cualquiera es, en muchos sentidos, un oficio para gente elegida. 

Hoy, dos años y medio después, ya hace un año completo que Àlex es agente inmobiliario con captaciones y ventas a su espaldas. Tengo muchas ganas de saber cómo le va y de compartir con vosotros esta entrevista. Tal vez empecemos a intuir qué pinta tendrá el agente inmobiliario del futuro.

La entrevista, ¿de qué hemos hablado? ¿Qué hemos aprendido?

Hemos visto que alguien brillante -¿tal vez precisamente por ser considerado brillante?- debe dar explicaciones cuando elige ser agente inmobiliario: a los padres, a los amigos, a los padres de amigos, a los antiguos profesores, “en general todo el mundo se sorprende”, nos decía Alex.

Hemos visto cómo los hábitos construidos y consolidados tras años de ser estudiante disciplinado y, a la vez, deportista de élite -con su disciplina de entrenamientos, con el desarrollo de la mentalidad necesaria para ganar partidos, para remontarlos- han representado para Àlex una magnífica preparación para disponer en su arsenal de agente inmobiliario de dos componentes que sabemos cruciales: mentalidad y hábitos.

¿Qué tienen en común los deportistas de élite y los buenos agentes inmobiliarios?: Mentalidad y hábitos.

Hemos hablado de cómo un agente inmobiliario de diecinueve años debe preparar su primeras visitas mucho más que cualquier otro agente para que le tomen en serio, para que ese vendedor o vendedora probable de cuarenta o más años, confíe en quien podría ser su hijo para vender su vivienda. 

En definitiva, hemos visto, creo yo, en cómo hay personas -las mejores- que convierten una dificultad en una oportunidad para superar las expectativas. Para ello, Àlex no sólo hacía todo el trabajo para conocer la casuística de un potencial vendedor o todas las características de una vivienda a la venta, sino  que durante los primeros meses “estudié dos o tres horas diarias para formarme”.

Àlex también nos ha hablado de sus referentes, de aquellas agencias o agentes de los que ha aprendido y que le inspiran: Raúl Santos en Vilanova, Frank Sitges y Factor Immobiliari en Sitges, Ryan Serhant en Estados Unidos, Monapart ;D y Diza Consultores Inmobiliarios en Madrid.

“El cara a cara siempre resultará relevante en el sector inmobiliario.”

Por último, sorprende que alguien de la generación de Àlex, asuma que el sector inmobiliario está casi al final de su viaje en términos de innovación del servicio. Asume que el cara a cara resultará siempre relevante, también para su generación, pero que se tenderán a digitalizar cada vez las partes de menor valor añadido del proceso de venta o compra de una vivienda. En este sentido, ambos coincidimos en que ya casi estamos en esta situación.

Conclusiones

Àlex es una rareza; un tipo que era estudiante excelente, portero federado de hockey patines, autor de un blog sobre productividad en el estudio… Podría haber elegido cualquier destino posiblemente más convencional y ha elegido, de momento, el de agente inmobiliario, lo que habla de su carácter decidido y una visión clara. Hay gente que empieza con un plan donde la mayoría de nosotros acabamos, a veces sin saber muy bien cómo.

Esta entrevista no solo es una historia sobre el crecimiento y desarrollo de un joven agente inmobiliario, sino también una reflexión sobre cómo las generaciones emergentes están redefiniendo roles y expectativas en el mundo profesional. Àlex sigue aprendiendo, se ha titulado como API y le está yendo bien en la agencia de Vic en la que trabaja. Sólo el tiempo nos dirá dónde acaba, porque sus primeros pasos no pueden ser más esperanzadores.

Conócele mejor en su web www.alexsoler.net y no te pierdas su podcast.