Un piso reformado en tonalidades neutras

  • 56 m22 habitaciones1 baño
  • Eixample.Barcelona

Después de la guerra

Entre las batallas de Lepanto y Castillejos encontramos al pobre Padilla, caído en la batalla de Villalar. Tres calles para tres conflictos. Uno esperaría escuchar el eco de las espadas y los cascos de caballos, pero nada más lejos de la realidad. Tampoco nos quita el sueño el tráfico de la Diagonal ni las excavadoras de Glòries. Llegas a casa derrotado tras la pelea en el trabajo con un cliente; en el mercado, con una señora que se te cuela en la frutería; y en la calle, justo debajo de casa, con ese señor que no ha querido recoger las cacas de su perro. Se te había olvidado lo reparador que es encontrar tu piso bien recogido, en silencio, con una botella de vino blanco esperando en la nevera y una ducha bien fresca para curar las heridas de la jornada.

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